Impermeabilización con Aplicación en Forma Líquida: Ventajas
Para impermeabilizar grandes superficies, como cubiertas o terrazas, existen dos tecnologías:
– Impermeabilizantes que se fabrican en láminas, rollos o mantas.
– Impermeabilizantes que se aplican en forma líquida.
Ambas tecnologías evitan el paso del agua, es decir, impermeabilizan la superficie sobre la cual se aplican.
Sin embargo los Sistemas de Impermeabilización Lotum con Aplicación en Forma Líquida ofrecen las siguientes ventajas adicionales:
1 . Larga Duración
Los Sistemas de Impermeabilización Lotum de Aplicación en Forma Líquida tienen una expectativa de vida de hasta 25 años.
2 . Continuidad y planicidad
Los sistemas efectuados con láminas, rollos o mantas no son continuos, ya que precisan de uniones entre ellas. Pero los sistemas de aplicación líquida sí son continuos, planos, sin solapes, juntas o uniones, evitando posibles entradas de agua por estas.
3 . Flexibilidad de diseño y adaptación a puntos irregulares
Se adaptan perfectamente a cualquier forma o elemento irregular presente en la zona a impermeabilizar. Es un sistema versátil: se aplica líquido y tras el curado forma una película continua.
4 . Poco peso añadido
Los sistemas de impermeabilización de aplicación líquida aportan poco peso extra a la cubierta, reduciendo el riesgo de sobrecarga de la misma provocado por el diseño o por la fatiga de los materiales.
5 . Reducción de riesgos de filtración en puntos singulares
La gran facilidad de aplicación de resinas líquidas en los puntos singulares es la mejor garantía de la correcta impermeabilización de éstos.
6 . Ausencia de puentes térmicos
Los sistemas con láminas precisan de una fijación térmica o con adhesivos entre las juntas, implicando un riesgo en la continuidad del sistema de impermeabilización. Sin embargo los sistemas impermeabilizantes de aplicación líquida garantizan una completa y perfecta continuidad.
7 . Facilidad de disponer y mantener instalaciones y equipos en cubierta
Los sistemas de impermeabilización con aplicación líquida pueden ser transitables, incluso para vehículos, posibilitando la colocación de equipos en las zonas recientemente impermeabilizadas.
8 . Facilidad de reparación y mantenimiento
Reparar una zona dañada de un impermeabilizante líquido es tan sencillo como eliminar la zona afectada, realizar una mínima preparación de la superficie y aplicar nuevamente el impermeabilizante, que formará de nuevo una película continua. El mantenimiento que requieren es nulo.
9 . No implican riesgo de incendio
Los sistemas de aplicación en líquido no requieren del aporte de calor o fuego, necesario para realizar las uniones de materiales suministrados en forma de láminas, por lo que no existen los riesgos relacionados con el uso de temperatura o fuego.
10 . Protección térmica de la estructura y del soporte
Reducir la temperatura interior de las instalaciones bajo la superficie impermeabilizada es posible con una protección termoreflectante adicional con Lotumcoat Therma RG.
11 . Amplias posibilidades de diseño
Los sistemas de impermeabilización líquida se pueden fabricar en una gran variedad de colores, para poder adaptarse a la estética requerida por la instalación a impermeabilizar. Además, permiten realizar diferentes diseños o impermeabilizaciones decorativas añadiendo áridos especiales. Con los sistemas de láminas no existe esta flexibilidad de adaptación.
12 . Simplicidad en los sistemas de evacuación de agua
Los sistemas de impermeabilización de aplicación líquida se adaptan con una facilidad extraordinaria a las formas más irregulares, garantizando una correcta unión con los diferentes tipos de evacuación de agua.
13 . Estanqueidad al aire
Con los sistemas de impermeabilización de aplicación líquida se consigue una excelente estanqueidad al aire.
14 . Facilitan la iluminación natural
Las resinas líquidas permiten una impermeabilización totalmente transparente y estable a la luz UV para aplicar sobre lucernarios, aprovechando al máximo la luz natural.
15 . Facilidad de adaptación a los sistemas singulares de ventilación
Como hemos comentado anteriormente no hay sistema que se adapte mejor a los elementos singulares y formas especiales que aquellos de aplicación líquida.
